Clima

Clima para el verano 2024: ¿Argentina será un horno?

  • En el Hemisferio Norte este año se batieron todos los récords de calor.
  • Especialistas anticipan qué pasará con nosotros en la era de ebullición global.

Después de un verano sofocante, en la Argentina esperábamos ansiosos los meses más fríos para descansar de tanto calor. Sin embargo, las temperaturas nos volvieron a sorprender. Hubo días que se parecían más a una tarde de enero que a una jornada invernal. ¿Invierno o infierno? Algo no anda bien.

Mientras vivíamos un veranito inesperado a fines de julio, llegaba la información de que en el hemisferio norte la ola de calor estaba afectando seriamente a muchas regiones. El futuro del que tanto se habló ya está acá. En pocos días comienza el verano, ¿se repetirá aquí lo que ya sucedió en la otra mitad del globo?

Julio 2023 se convirtió en el mes más caluroso desde que existen registros de medición, según informaron la Organización Meteorológica Mundial (OMM) y el Servicio Copernicus. Durante dicho mes se experimentaron récords en todos los ámbitos: el lapso de tres semanas más caluroso, los tres días más calientes y las temperaturas oceánicas más altas para aquella época del año.

Probablemente éste sea un verano un poquito más cálido de lo que ha sido el promedio de los últimos 30 años“, dijo  Leandro Díaz Investigador del Conicet

Antonio Guterres, secretario general de las Naciones Unidas, habló sobre esta situación y realizó un llamado de atención: “La única sorpresa es la velocidad del cambio. El cambio climático está aquí. Es aterrador. Y es apenas el comienzo. La era del calentamiento global ha terminado. La era de la ebullición global ha llegado”.

Pilar Asefh, cofundadora de la agrupación ambientalista Periodistas por el Planeta, analizó estos dichos y el momento que estamos transitando: “Para mí, el término ebullición implica estos estallidos que estamos pasando. Tenemos la temperatura más alta de la historia, la noche más calurosa registrada, récords en los Estados Unidos, en Europa, en África, inundaciones, sequía. Lo hablamos en números, pero todo esto se traduce en vidas. Hubo muertos por las olas de calor y por las inundaciones. Lo estamos sintiendo en nuestra propia piel. La sensación es que no hay un rincón de la Tierra que no esté siendo impactado: todo está sucediendo al mismo tiempo”.

Lejos de ser algo que sucederá dentro de mucho tiempo, la crisis climática va ganando protagonismo. “Cuando se habla de calentamiento global, siempre da la impresión de que es algo a futuro, abstracto y paulatino, cuando el cambio climático ya es una realidad presente. En la Argentina estamos viviendo fenómenos extremos como inundaciones y sequías alternadamente, explica Mercedes Pombo, referente del movimiento Jóvenes por el Clima.

Es muy importante remarcar esto: “el cambio climático no es solamente algo medioambiental, porque afecta a todas las personas y a la vegetación, a lo económico, a lo social, a la salud, entre otras“.

Creo que hoy nos encontramos en un punto muy crítico, estos calentamientos que se alcanzaron en el último tiempo y durante las primeras tres semanas de julio no tienen precedentes en 120.000 años, son niveles súper altos que ya están afectando, en primera persona, a las poblaciones. Antes, cuando ocurría algo a raíz del cambio climático se hablaba del derretimiento de un glaciar; ahora, le está tocando la puerta a la gente”, analiza Bruno Giambelluca, coordinador de la campaña de cambio climático y vocero de Greenpeace.

Imaginemos un mundo más caliente. Que aumente la temperatura no habla solo de que vamos a necesitar refrigerarnos más, sino también de que se van a potenciar los fenómenos extremos, tanto de inundaciones como de sequías.

Desde ya, es un hecho inusual que las Cataratas del Iguazú deban cerrarse al turismo por sobreabundancia de agua con una fuerza violenta, como sucedió a fines de octubre, un mes donde la temperatura media del país contó con máximas de 30 y mínimas de una sola cifra en una misma semana.

La corriente del Niño modera las temperaturas: este verano será más húmedo, con más lluvias, manifestó José Luis Stella Servicio Meteorológico Nacional.

¿Existe un límite de calor para que un humano pueda vivir saludablemente? “Hay ciertas temperaturas que hacen inhabitable la vida en la Tierra y, por eso, la comunidad científica insiste en no sobrepasar el aumento de 1.5° en el promedio global”, explica Mercedes Pombo, “superado el 1.5° de aumento de temperatura, se estima que las condiciones de vida en la Tierra van a ser muy inhóspitas. Hoy en día estamos en aproximadamente un aumento de 1.1° respecto a los niveles que teníamos en épocas preindustriales”.

El compromiso para bajar el uso de combustibles fósiles debe ser mundial (todo el planeta involucrado) y a fondo, con mucha voluntad política, aseguran todos los especialistas.

Los procesos que se pongan en marcha tienen que ser planificados y pensados para que su impacto tenga efectos a largo plazo.

Lo principal, dicen, es transicionar hacia las energías bajas en emisión, que son las renovables (solar, eólica, hídrica). “Negar el cambio climático no es escepticismo, es negacionismo basado en la desinformación y, sobre todo, en la protección de intereses que se ven vulnerados por las medidas que habría que tomar”, afirma con contundencia Sandra Díaz.

La disminución de algunos biomas en la Argentina ha sido dramática”, señala la científica Díaz. “Desde 2007, se ha desforestado una superficie del bosque chaqueño equivalente a más de 60 ciudades de Buenos Aires.”

Nuestra principal herramienta para poder absorber el dióxido de carbono son los ecosistemas. Por eso, la deforestación es un problema. Tenemos una muy buena ley de bosques, pero se implementa mal”, agrega Mercedes Pombo.

Se estima que en los últimos 300 años ha desaparecido el 87 por ciento de los humedales del planeta.

Argentina tiene más de 600.000 km² de humedales, que representan el 21,5% de la superficie, pero sigue pendiente la sanción de una ley para preservarlos.

Luego de tres años con el fenómeno climático llamado la Niña instalado, ahora se está desarrollando el Niño, el cual ya provocó que en otoño-invierno hayamos tenido más calor de lo normal en el centro y norte de la Argentina.

Luego de tres años con el fenómeno climático llamado la Niña instalado, ahora se está desarrollando el Niño, el cual ya provocó que en otoño-invierno hayamos tenido más calor de lo normal en el centro y norte de la Argentina.

En resumen, el cambio climático ya está entre nosotros. Una nueva normalidad se nos está presentando y es momento de ajustar todo lo que se pueda para que las consecuencias tengan el menor impacto posible.

El planeta es uno solo y hay que cuidarlo. Lo está pidiendo a gritos de calor.

Fuente: Clarín