Murió Tina Turner, la reina del rock

Este miércoles murió a los 83 años Tina Turner, una leyenda del rock. La cantante, que padeció una larga enfermedad, estaba en su casa en Kusnacht, cerca de Zúrich, Suiza.

“Con ella, el mundo pierde una leyenda de la música y un modelo a seguir”, expresó un primer comunicado difundido por su representante y reproducido por la revista Variety.

Más tarde, los perfiles oficiales de la artista confirmaron la noticia. “Con gran tristeza anunciamos el fallecimiento de Tina Turner. Con su música y su pasión ilimitada por la vida, encantó a millones de fans alrededor del mundo e inspiró a las estrellas del mañana. Hoy despedimos a una querida amiga que nos deja todo su mayor trabajo: su música. Toda nuestra sincera compasión va con su familia. Tina, te extrañaremos mucho”, manifestaron sus allegados a través de un comunicado.

Carismática, con una potente voz y décadas de éxitos, la estadounidense es una leyenda del rock and roll.

Sus últimos años estuvieron marcados por problemas de salud. En 2016 le diagnosticaron cáncer intestinal y en 2017 debió someterse a un trasplante de riñón.

Con diez álbumes de estudio y otros tantos grabados en sus giras o en recopilaciones, Tina Turner acumuló múltiples premios –incluyendo 12 Grammys- y también tuvo algunas breves participaciones en el cine en producciones como “Tommy” (1975), “Max Max” (1985) -con Mel Gibson- y “Last Action Hero” -con Arnold Schwarzenegger- en 1993.

Anna-Mae Bullock, como fue llamada el 26 de noviembre de 1939, nació en Brownsville, Tennesse. Sus padres trabajaba en plantaciones de algodón. Trasladados luego a Saint Louis, conocieron todos los padecimientos de aquellos que sufrían la discriminación racial.

Pero fue en St Louis, en el local nocturno Manhattan, donde la adolescente Anna-Mae –quien ya cantaba en el coro de la iglesia- conoció a quien quedó como uno de los pioneros del rock a nivel mundial: Ike Turner compuso su icónico tema “Rocket 88”… en 1951.

En el Manhattan conoció a Ike Turner. Ike & Tina Turner fue una dupla exitosa en los 60, con ella como un símbolo del soul y el “rhytm and blues”. También fue un matrimonio volcánico. Tina describió a su ex esposo como “violento, abusador, maltratador, explotador, machista y controlador”.

El matrimonio terminó en julio de 1976. “El día de mi libertad”, lo definió Tina Turner. En los años posteriores, mientras ella ascendía al estrellato, él se hundía en las drogas.

Tina se reinventó como artista, con sus espectaculares versiones en rock, pop, baladas. Eran frecuentes sus giras europeas. Los discos como “Private dancer” (1984) y “Break every rule” (dos años después) aún hoy son sus mayores sucesos. Llenó estadios en todo el mundo. Sólo en Río de Janeiro, en 1988, reunió a una multitud de 150 mil personas.

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(DB – Clarín)